Por un lado el ataque a las fibras sensibles del corazón con la niña que come y cena esquites, luego la indignación inducida a la boca del estómago con las imágenes del asesino del metro Balderas, después una pasadita por el hígado con los diputados madreándose en la tribuna, ah! y sin olvidar que en el rubro de corrupción la clásica del patrullero mordiendo al conductor infractor.
Considero que cuando un mensaje utiliza de preámbulo el espectro emocional del receptor es porque el emisor no quiere que razone lo que le dice, o evita que piense y deduzca otras cosas.
Por ejemplo, Televisa y TvAzteca, como icónicos portavoces de la iniciativa nos lanzan el llamado a la unión y al rescate de buenas noticias. ¿Qué clase de unión es aquella en la que uso las contribuciones de los demás y realizo deducciones fiscales a mi nombre? Teletón.
No me gusta ser pesimista, simplemente no me convence la iniciativa México.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Sin ánimo de iniciar discusiones bizantinas, solo ampliar el espacio para que comentes.